Cuando el agua me sepa amarga. Cuando mi vida ya no tenga sentido. Cuando su amor ya no este, cuando sus caricias ya no las sienta, cuando sus besos ya no me gusten. Ese día podré morir en paz. Al saber que algún día experimenté todas esas sensaciones. Me sentiré orgulloso de mi mismo, por haber logrado hacer todas esas cosas, porque ese día pronto llegará y con dignidad y aceptación lo aprenderé a esperar. Me ha dolido enterarme de que mis sentidos pronto se vencerán, y mi alma y cuerpo también se apagaran. Pero nada es eterno en la vida, y yo tampoco inmortal. Muchas cosas no realicé, y muy alegre tampoco me iré. Pero una familia hace año formé, y que mi huella en sus corazones se que dejé.
Por eso y con la frente en alto le digo: Muerte venme a buscar.
Deigar Miranda
trascender por medio del amor de una familia ha de ser fantastico!!!!! Intenso!!! Besos!!!!!
ResponderEliminarPero que tarde un poquito más que tienes que escribir en tu blog.
ResponderEliminarSaludos
"Pero nada es eterno en la vida, y yo tampoco inmortal".... siempre encuentro en tus escritos alguna exquisita frase que vale la pena resaltar... debido a la verdad que refleja...
ResponderEliminar...hay que aprovechar y hacer lo que puedes y si no lo haces... estar feliz por lo que hiciste!!
Muy buen escrito Deigar
Saludos!! =)
No llames a la "Dama" déjala que se pasee alegremente, que no se pare...
ResponderEliminarUn abrazo.
No llames tan pronto a la muerte, que una vez llega nunca se va.
ResponderEliminarPor cierto, al fin encuentro a uno de los míos.
Un saludo.
Amargo y bello... Has escrito algo peligrosamente atractivo...¡Bravo!
ResponderEliminarUn saludo cariñoso!!!!
Hola, ante todo quiero agradecerte tu visita, gracias. Es bonito lo que has escrito y has elegido un tema profundo, aunque eres muy joven y seguro que tienes cosas más alegres.
ResponderEliminarUn beso.
Excelente Deigar..!
ResponderEliminarMe gusta las figuras que tejes en tus escritos.